sábado, 14 de agosto de 2010

OUTBACK. Kakadú, la naturaleza en estado puro

Y llegamos al paraiso natural de Kakadú. El parque natural más grande de Australia. Paseamos con Brenda y Philip a través de bosques de flores amarillas. Hemos visto cocodrilos, pajaros de todos los colores, pájaros que bailaban que parecian buitres y que Philip dice que se llaman ‘brolgas’, pero para mi son buitres aunque Philip diga que soy tonto.
Las pinturas en las rocas realizadas por los aborígenes hace más de 20.000 años impresionan por la calidad y porque parecen radiografías, ya que muestran los huesos y principales vísceras. Son realmente impresionantes y precisas. Hay peces, canguros, personas, etc. Para los aborígenes, estos lugares remotos debajo de las piedras era su forma de transmitir la cultura. A través de estas pinturas sabemos que todos los seres vivos están interconectados. El rollo 'Avatar' hace tiempo que se inventó. Aquí os dejo unas cuantas muestras del arte aborigen. De hecho, los aborígenes tienen una habilidad especial en el arte de la pintura. Hay una industria creciente en este tipo de arte.
Hemos visitado muchas galerías de arte y he comprado varias cosas. Me gusta al arte aborigen. La mayoría de los artistas son mujeres. Hay que explicar que los australianos de origen occidental tienen un serio problema con los aborígenes que habitan Australia desde hace más de 60.000 años. Recordar que la actual Australia se fundó en 1788. Poco más de 200 años. Y esta cultura ha sometido a la aborigen. Pero los aborígenes no se adaptan a esta nueva vida. Y los que lo hacen, caen en drogas y alcohol. Delincuencia y pobreza (desde nuestro punto de vista) es el denominador común de los aborígenes que viven en la ciudad de los blancos.El arte, y concretamente el arte de las mujeres, es uno de los pocos puntos de comunicación entre los dos mundos. Evidentemente que no soy un experto en Australia y que ésta es una visión personal y sesgada. La situación no es nada fácil porque aniquilar más de 60.000 años de cultura no es nada fácil a pesar de creerte muy superior en tecnología y avances sociales. Los de la península ibérica lo hicimos hace 500 años en Sudamérica y, excepto en pequeños reductos, nos encargamos de aniquilar la cultura local. Que cada uno saque sus propias conclusiones. Aquí os foto con uno de los artistas aborigenes. Le compré esta estupenda pintura. El buen hombre empezó a pintar a los 70 años. Una serpiente y un 'catfish' en el agua.

Después de este retrato social, vuelvo a mis crónicas ligeras, que supongo encontráis en falta. Ya me pasó el subidón de los primeros dias, y a fecha de hoy, descubriendo maravilla tras maravilla en Australia, solo me queda tiempo para disfrutar los sentidos y dormir. Porque nos pegamos unas palizas de levantarnos temprano para ver/hacer cosas que no os explico. Pero lo disfruto de lo lindo.
Ayer mismo me bañé en un río, en medio del parque infectado de cocodrilos (decir que éste está asegurado y DICEN que no hay cocodrilos), y me di un masaje con Brenda bajo una catarata de agua clárida y límpida a lo Tarzán y Jane. Como el anuncio de Rexona. Claro que esto deja a Philip como la mona Chita. Nada más lejos de mis intenciones. En cualquier caso sería un gorila porque el tío está más fuerte que el aguarrás.

Cocodrilo en inglés es Crocodile. De aquí viene lo de crocos. Y en Kakadú, el parque nacional más grande e importante de Australia, está infectado de crocos. Son los reyes del parque. Los reptiles más grandes de la tierra. Ayer por la mañana nos levantamos a las 5.30am para ir a verlos. El amanecer en Kakadú es como debía ser el amanecer cuando el hombre no habitaba la tierra. Me recordó a esas imágenes preciosistas de Jurassic Park donde se veía una especie de paraíso lleno de animales. Inmensidades verdes recortadas por árboles. Y pájaros en todos lados. Pájaros que son los antiguos dinosaurios. Verdes, negros, azules, púrpura… El contraste del verde con la inmensidad de animales que se ven por metro cuadrado te deja medio lelo. Tendrían que aconsejar llevar cazoleta para recoger la baba. Me acordé de mi hermano Paco, cazador nato. Este paisaje seguramente es del de sus sueños. Nunca he visto tanto bicho y tan bonito junto.

Águilas inmensas con la cabeza blanca pescando. Martín pescador de un azul eléctrico y un naranja flipante. Garzas, garcetas, patos, somormujos, … Y claro, en medio de toda la belleza infinita del tiempo atrás aparece el croco como el coco en los cuentos. Ahí está, agazapado buscando siempre algo que llevarse a los incisivos.

No se porqué a los humanos nos atrae tanto lo que nos puede aniquilar. El poder del croco en su medio. La que lleva el barco hace la bromita típica de: “si se hunde el barco aquí tienen los salvavidas. Pero no se preocupen, que si eso pasa, los salvavidas no sirven de nada porque verán a los crocos de muyyyyyyy cerca….. ja, ja!” Y yo que pienso que esto en Cádiz tendría su gracia, pero en medio de una laguna infectada de crocos no tiene ninguna. Y menos con el poco arte que tienen los australianos comparados con los de Cái….”

Pues eso: que he visto la naturaleza en estado puro. Eso si: rodeado de otros turistas que consumen Kakadú igual que lo hago yo. Y pagamos un módico precio por ver un par de horas lo que deberíamos ver cada dia. Sin tantas comodidades.

Al mediodia nos damos una santa caminata y nos vamos a ver arte. Estamos en Ubirr. Pero no a una galería ni un museo en una ciudad. A la mejor y más auténtica galería del mundo: las cuevas que rodean Kakadú. Los aborígenes tienen tradición de contar las historias a través de pinturas. Los padres llevan a los niños a estos lugares sagrados para explicar el origen de la vida. Según ellos, una gran serpiente creó la vida en el origen del tiempo. Esta gran serpiente se convirtió en los ríos que dan la vida a la tierra. Hay innumerables historias de cómo los aborígenes explican su interrelación con la naturaleza y la vida. Y lo hacen a través de las pinturas. Aquí os dejo unas cuantas muestras que a mi me han encantado. Estas pinturas utilizan una técnica llamada de Rayos X. Como podéis ver, pintan animales y personas con la estructura de los huesos y las vísceras como el corazón.

Nos subimos a una cima de una montaña cerca de las pinturas y vemos la tierra de Arnhen. Esta tierra es sagrada. No se puede visitar. Y vemos una maravillosa puesta de sol desde la cima. Otro momentazo para el recuerdo.

¿Y aquien encuentro en medio de este no-nada? Pues a dos catalanes. Una pareja que está de luna de miel. En medio de esa visión de la tierra prohibida, les digo a los catalanes: 'maco, oi?' y se lo flipan. Y yo también. Son l'Eva i en Pol. Estamos en todos lados.

Esta mañana hemos visto los crocos saltarines. Consiste la cosa en ir un barco (misma bromita de los salvavidas…ja, ja… que me parto) y poner un trozo de carne en la punta de una caña y ver como los tiburones saltan, cual delfines, hacia la carne. Ni el show ni la gente del barco me han gustado nada. Eso si: los bichos no te dejan indiferente. Lo mejor ha sido que un montón de águilas se han lanzado sobre el barco, y una chica les ha lanzado trozos de carne que cogían al vuelo de forma espectacular. Eso si que ha sido maravilloso. Ver volar águilas a dos metros de ti y lanzándose en picado hacia el señuelo. Precioso ver el vuelo de estos pájaros tan preciosos.

Por la tarde, nadando en varias pozas de varios ríos del Litchfield National Park, cerca de Darwin que es nuestro próximo y último destino con Brenda y Philip.

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