jueves, 2 de septiembre de 2010

DARWIN y CAIRNS. Fin del viaje priscilero

Queridos todos, el viaje priscilero terminó en Darwin. Después a ver la Gran Barrera de Coral en Cairns

De Darwin destacar que tiene unas playas preciosas de arena blanca y azul turquesa, pero en las que no te puedes bañar ni muerto, porque te mueres. Medusas cubo ( Box jellyfish ), tiburones y cocodrilos de agua salada, etc... se encargan de ello con mucho gusto. Tienen una playa artificial que parece real tierra adentro para que los locales se puedan bañar en algún sitio que no sea su bañera.


También me gustó el rodeo y el boxeo. Philip estaba superemocionado porque habia el Festival de Darwin. Consiste en una especie de feria de verano a la española, pero con atracciones locales como rodeo a la americana. La marca RM Williams australiana tiene aquí a sus máximos seguidores, incluyendo a Philip. Pues lo que hemos visto en las películasde vaqueros, pero a la australiana. Un poco demasiado americanizado y con poco carácter local. Podrían haber cabalgado cocodrilos de Kakadú, digo yo. O cabalgar canguros, o emúes, o wombats. En fin: divertido y mucho sudor, y peste a vaca.

Flipante una especie de carpa de circo de boxeo donde te podia ostiar con unos pedazos de cachos de carne que se exhibían públicamente como se exhibe la carne en la boquería. Incluyendo las morcillas. Flipante. En pleno siglo XXI y las mismas atracciones de feria que en la edad media. Y es que el hombre con sus luces y sus sombras no cambia casi nada en el espacio y el tiempo. Nos gusta ostiarnos y domesticar animales. Habian de cachas y fuertes que se supone que si los aostias te dan una pasta. Y los habian pequeños y debiluchos que parecian fáciles de currar, pero imagino que el truco estaba ahí precisamente. Que tenian que ser los que mejor pegan...




Esta australiana que sale al final del vídeo es la que da realmente enspanto de pegarse con ella. Se supone que el hombre de color que la acompaña se acaba de ostiar con uno de los que se exibían en esa especie de carpa-escaparate.

Como diría Almodóvar: puro siglo XIX.... (para los que no sabéis leer en latin, unos cuantos, XIX = 19)

La feria se podria parecer a la de cualquier ciudad de verano de España. Con algunas particularidades. Por ejemplo, ver a unas australianas bailando la danza del vientre no tiene precio. Todas graciosas y garbosas ellas. Habia una que tenia una cintura que para mover el vientre tendria que hacer auténticas obras de ingeniería o mejor dicho, de charcutería. Vaya ... parece que vuelvo a estar con el colmillo afilado... tendré que ir con cuidado de no morderme la lengua, no sea que me envenene.

Manu se hubiese partido de la risa y cegado en lágrimas. Pobrecitas, deberian pagarles un viaje a Oriente medio, una sesiones de fitness (cardio, no sea que se nos tonifiquen y aumenten el volumen) y unos bonos para liposucciones. Y ni así... Pero no hay que dejarles de reconocer la gracia de entretenernos y entretenerse, ya que seguramente no se pueden bañar en la playa (por los bichos ... me refiero a los salvajes), y para qué leches van a estar ellas delgadas y sugerentes, para sus maridos? Habeis visto 'Muriel's wedding'? Pues eso, que se entretienen bailando y se sienten supersexys y eso es lo mejor de todo.

Aqui os presento a Las Perlas de Oriente Australianas:


En la feria también tenian unas cosas muy graciosas que eran unas bolsas muy grandes llenas de regalines, chupachups, etc... que te las vendian empaquetadas. Philip las coleccionaba como una criatura diciento ( a la australaiana, claro): mira dos cropanes y un tigretón, más unas gominolas por solamente 5$! Que ganga! Una criatura de 2 años no es más feliz que Philipo. La criatura de poco menos de 100kg se subio a no se cuantos cacharros de feria. Y Brenda y yo le mirábamos, nos partíamos porque el muchacho gritaba y hacia aspavientos con las manos como fiuuuuuuuu, le hacíamos fotos al nene en el cacharro. Teniamos miedo que se pusiera a escupir al aire en medio de los giros de los cacharros de feria, o alguna travesura parecida. Lo dicho: nuestra criaturita. Creo que es lo más cercano que he estado nunca de parecer un padre de familia mirando al nene en los caballitos.

Una vez Brenda y Philip volviero a Sydney y Auckland, yo me fuí a Cairns. Me llovió 3 dias y el cuarto que hizo un poco de sol, me fui a snorkelear a la Gran Barrera de Coral. El barco y la gente del barco superbien. Pero el dia estaba superagitado y solo decir que no fué nada agradable bucear porque la corriente y las olas lo hacian superdificil. Cuando volví al barco, di de comer gratis a los peces el desayuno de la mañana. Es la primera vez que me mareo en un barco. Por lo tanto, pongo Cairns en un punto y aparte del viaje. Me sirvió para descansar del final del viaje priscilero. Aqui os dejo una foto alimentando 'pececillos'. Esta vez con comida sin digerir previamente.


Próximo destino: Sydney